Silent Legions es un juego de rol publicado en 2015 tras un exitoso Kickstarter y que se nos presenta como un juego de terror lovecraftiano situado en la actualidad y basado en sistemas tipo OSR. Pese a que tengo una relación… particular con la OSR, soy muy fan de todo lo relacionado con Lovecraft. Pero dos fueron los factores que me hicieron decidirme a leerlo. Por un lado se presentaba con un formato sandbox, algo insólito en juegos de este tipo. Por otro, se definía como un juego de terror lovecraftiano, pero no sobre los Mitos de Cthulhu; más bien, proponía al DJ crear su propia mitología de horrores cósmicos, eliminando de un plumazo el tedio que pudiera tener cualquier fan de los Mitos de Cthulhu por el uso y abuso al que han sido sometidos en el mundo del rol durante las últimas décadas. Un sandbox de horror cósmico y con una cosmogonía nueva y única eran alicientes más que suficientes para empezar a leerlo.
Silent Legions fue publicado por Sine Nomine Publishing y es obra de Kevin Crawford, autor entre otros de pesos pesados como Stars Without Number o Godbound. Confieso que no había leído nada de Crawford hasta ahora, pero tras leer este Silent Legions creo que repetiré (y Spears of Dawn me llama mucho…). El juego se presenta como un manual de 189 páginas con portada a color e interior en blanco y negro, ilustraciones incluidas. La maqueta no podría ser más espartana, con texto (bien densito) a dos columnas sobre un fondo blanco prístino. Las ilustraciones cumplen sin más, la imagen de portada generada por ordenador es un poco rara y confieso que he echado de menos alguna ilustración interior más para hacer más cómoda la lectura en puntos en los que el contenido se volvía un poco espeso (y es que esas 189 páginas están repletas de información, tablas y consejos de todo tipo; como decía alguien el otro día por G+, un manual de Crawford es como un cerdo, se aprovecha todo). Sin embargo, en defensa de Crawford hay que decir que ha liberado todas las ilustraciones del juego (portada incluida) en un pack, que podéis descargar aquí, y que se puede emplear tanto para usos personales como comerciales. Un detallazo de esos que no se ven muy a menudo.
Pero vamos al contenido propiamente dicho. Tras una rápida introducción que presenta el juego y desglosa los contenidos del manual, pasamos a un primer capítulo que describe la creación del personaje. Como he dicho, hablamos de un juego de terror moderno, así que las clases de personaje son atípicas y muy limitadas para ser algo con aroma a OSR. De hecho solo hay cuatro: Investigador, Erudito, Tipo Duro y Socialite, que vendría a ser el personaje con habilidades sociales y buen carisma. Por otro lado es suficiente para que, con las decisiones que tomaremos en el resto del proceso de creación, obtengamos un personaje lo bastante único al concluir. La creación, como decía, tiene aroma OSR, aunque presenta algunos elementos nuevos e imprescindibles en un juego de estas características, como la Locura, que los personajes irán acumulando a medida que se enfrenten con horrores cósmicos, o la Expertise, una puntuación que como en tantos otros juegos sirve igual para un roto que para un descosido: puedes gastarla para repetir una tirada, para activar una habilidad de tu clase o incluso para usar magia. A destacar también el dado de Slaughter (o sea… Matanza, aquí son bien claritos), que permite hacer hasta daño ¡triple! en un ataque. Sí, Silent Legions puede ser bastante mortal, pero eso tampoco es novedad en juego de horror cósmico, ¿no?
Tras esto pasamos al capítulo de reglas del sistema, que tampoco tiene mucho secreto, y que más allá de las mecánicas OSR habituales (combate, tiradas de salvación, uso de habilidades…) incluye las ya mencionadas reglas para la Locura (y su curación). Me ha parecido interesante el concepto de los Delirios, trastornos mentales que los personajes pueden utilizar para reducir su Locura (sí, aquí se reduce Locura, no se gana Cordura), y que pueden ayudar a dar mucha riqueza a la personalidad de nuestro PJ.
La cosa se empieza a complicar en la siguiente sección, donde se presenta la magia (o más bien, brujería) en Silent Legions. Nos encontramos con una interesante división: por un lado tenemos los hechizos, rituales que requieren unos preparativos largos y con unos requisitos específicos, pero que también tienen efectos muy potentes. Evidentemente hablamos de efectos muy alejados de lo habitual en un juego OSR al uso, y más cercano a un juego cthulhoideo de toda la vida: protecciones contra abominaciones, portales, ventanas al futuro, lámparas que revelan lo que está oculto… Todo ello dividido en cinco niveles, y siempre con un coste de Locura asociado por su aprendizaje. Por su parte, las disciplinas se acercan más a lo que serían los hechizos de toda la vida, de carácter más inmediato y que acarrean un coste en Locura para ser dominadas debidamente por su usuario. Por si todo esto fuera poco, también se incluyen algunas tablas para crear nuevas brujerías y hechizos si el DJ lo considera necesario.
A continuación entramos en lo que es puramente la sección del DJ, y que ofrece todo lo que necesitas para crear tu propia campaña sandbox de horror cósmico a través de una abrumadora cantidad de tablas y descripciones. A lo largo de las siguientes 80 páginas se nos explicará cómo crear nuestro panteón*, nuestros grimorios arcanos, nuestros cultos, nuestras razas alienígenas y nuestros objetos mágicos, con solo hacer algunas tiradas o elegir a dedo algún resultado. Pero esto es un juego de tipo sandbox, con un mundo totalmente abierto y a disposición de los juegadores, y Crawford no lo olvida: también explica de forma minuciosa y clara cómo empezar a abordar un sandbox, eligiendo una región del mundo real y generando toda una serie de localizaciones y posibles historias que se puedan desarrollar allí. El uso de las plantilas de aventuras (descripciones genéricas pero lo bastante detalladas como para usar de improviso) o de las etiquetas de localización (resúmenes con información sobre secretos, enemigos y aliados que se pueden encontrar en diferentes puntos de tu sandbox) son formas magníficas de hacer menos abrumador el inicio de una campaña de este tipo para el DJ novato. Todo lo imaginable (e incluso un poco más) está incluido en estas páginas y tablas, desde la estructuración de una aventura en torno a una serie de escenas (no solo hablamos de gancho, desarrollo y desenlace, sino de escenas de persecución, de emboscadas, de investigación…) hasta la creación de una kelipah, un curioso concepto que viene a homenajear las lovecratianas Tierras del Sueño. Los kelipot son pequeños (o no tan pequeños) lugares fuera de nuestra dimensión en los que se pueden encontrar las cosas más oníricas o más escalofriantes. (Y de paso también ofrecen una buena vía de escape para quienes quieren recrear contenidos más cercanos a la fantasía que caracteriza a la OSR).
El último tercio del manual desarrolla otros aspectos que pueden ser importantes en un sandbox de horror cósmico. Por ejemplo, cómo pueden interactuar los diferentes cultos presentes en una misma localización, o incluso cómo puede crecer un culto (u organización) creado por los mismos PJs, con un interesante y lúdico subsistema por turnos con el que cada culto puede declarar diferentes acciones para atacar a sus rivales, crecer en influencia u obtener nuevos recursos. Tras ello nos encontramos con un nutrido bestiario con criaturas de todos los colores, además de (sí, lo habéis adivinado) más tablas para crear nuestras propias abominaciones salidas de los intersticios estelares.
Por último, el manual se cierra con una serie de recursos para DJs, muchos de los cuales fueron desbloqueados durante el Kickstarter del juego, y que resultan de lo más útil. Empezando por un magnífico generador de nombres de resonancias lovecraftianas, pasando por consejos para adaptar a Silent Legions contenidos de otros juegos (bien de Sine Die, bien de la mismísima Llamada de Cthulhu) y terminando por varias propuestas alternativas a la premisa básica de Silent Legions. Me ha encantado «Luchadores Against Cthulhu», una versión más pulpera en la que los PJs son luchadores enmascarados que deben hacer frente a los horrores llegados de más allá del espacio. Aunque debo decir que «The Palimpsest Society» es la que más ha hecho fluir mis jugos mentales: ¿un culto que adora a un dios cuyo poder es la mutabilidad y que es capaz de redefinir constantemente la realidad en base a lo que creen fervientemente sus seguidores? Madre mía, qué conceptazo…
El manual termina con un listado de mecenas, una hoja de personaje y un breve índice de contenidos.
¿Y qué me ha parecido? Pues… hacía mucho tiempo que no leía un libro tan diferente y tan cargado de información útil como este. De hecho, Silent Legions es casi más un toolkit que un juego. No es apto para todo el mundo por la densidad de su contenido y el trabajo que requiere por parte del DJ para dar forma a su propio mundo, pero la recompensa vale la pena. De hecho, hay que reconocer que resuelve con solvencia lo que, como decía al principio, resulta un reto casi imposible a priori: un sandbox es uno de los formatos menos adecuados para los juegos de este tipo, donde casi siempre nos encontramos con aventuras mucho más marcadas y “cerradas”. Sin embargo, cumple con creces, diseccionando hasta extremos fascinantes los principales elementos de los juegos de horror cósmico y ofreciendo todas las herramientas imaginables para hacer realidad ese sandbox. Eso, combinado con la refrescante (y casi obligada) redefinición del clásico panteón de deidades primigenias, adaptándolo a algo de tu propia cosecha, es suficiente para hacer de este manual una auténtica joya, cuyo único pero me parece la presentación de la información de forma demasiado “densa”. Por otro lado, no creo que sea un manual escrito para ser leído del tirón, sino más bien una herramienta de consulta y uso constante… así que igual el problema ha sido mío por querer leerlo todo seguido.
Sea como sea, yo le doy un…
(*No he podido resistirme y he hecho unas tiradas en la sección de «crea tu propio panteón». Con media docena de tiradas he generado un panteón basado en Los 6 Dioses Prisioneros, entidades cósmicas que han sido encerradas más allá de nuestra dimensión por algún enemigo. Les lidera Saa-Kaa-Yhoyaglunis, El Contemplador que Aguarda al Sol, y por debajo de él moran Ithgla-Sogthoth, El Caos Radiante Que Devora las Plantas, e Yr-Oz, el Corruptor Sangrante. Os dejo a vosotros generar los otros tres…).